¿Te has preguntado por qué si llevas un buen tiempo entrenando no ves cambios en tu cuerpo? ¡Creemos saber la respuesta! Hay errores muy comunes que las personas cometemos a la hora de entrenar y ni siquiera nos damos cuenta.
Toma nota y cuando estés entrenando pon atención para identificar si estás haciendo algo mal ¡Estás a tiempo de corregirlo! Recuerda que con disciplina y constancia puedes lograr cualquier objetivo que te propongas.
No calentar
Uno de los errores más frecuentes es no preparar tus músculos antes de entrenar, si omites este paso lo más probable es que te lesiones por no preparar tu cuerpo para realizar actividad física. Por eso es importante hacer una rutina de calentamiento en la que incluyas ejercicios de estiramiento, movilidad articular, entre otras. ¡Notarás la diferencia!
Descanso insuficiente
Para tener un rendimiento efectivo en tus actividades es importante que descanses lo necesario, para esto se recomienda que incluyas tiempos de descanso entre las sesiones de entrenamiento para que se recupere tu cuerpo y rindas al cien en tu próxima sesión. No olvides también dormir 8 horas diarias. Ten en cuenta que entrenar en exceso no hará que avances más rápido.
Ropa y zapatos inadecuados
Recuerda utilizar ropa y zapatos deportivos para que te puedas mover con total libertad y dar pasos firmes y más seguros. No usar lo correcto puede volverte más propenso a lesiones, dolores o a cansarte más rápido, aparte hace que sea más difícil realizar cualquier actividad física.
Usar ropa deportiva es indispensable porque la normal encierra sudor en ella debido a que no es transpirable y puede causarte problemas en la piel.
No ser constante
Si crees que por haber descuidado unos días de entrenamiento los puedes recuperar en un día, ¡estás muy equivocado! Con esto solo logras que tu cuerpo no se acostumbre a una rutina y que el esfuerzo que haces en un día sea tan intenso que pueda causarte problemas.
Establece desde un inicio los días que dedicarás a entrenar y los días que serán de descanso, trata de que no sean más de dos a la semana, ¡la constancia es la clave para llegar al éxito!
Hacer siempre lo mismo
El practicar la misma rutina para cada entrenamiento no es bueno, es importante que conforme va pasando el tiempo puedas variar las cargas para aumentar tu nivel de esfuerzo además de ejercitar diferentes zonas del cuerpo, así se acostumbrará poco a poco y verás resultados con el paso de los días.
No comer ni hidratarte adecuadamente
Sabemos que al entrenar expulsamos muchos líquidos por medio del sudor, por eso es importante mantenerse hidratado y no solo durante el entrenamiento, fuera de eso, al llevar una alimentación saludable obtendrás resultados, ya que es la base para tener energía y mover tu cuerpo. Enfoca tu dieta de acuerdo a tus objetivos, lo mejor que puedes hacer es acudir con un profesional.
Después de checar los errores y asegurarte de que no estés cometiendo alguno o corregir el que cometías. Con esto comenzarás a notar resultados ya que probablemente no te estaban dejando avanzar, recuerda que con paciencia y dedicación podrás ver reflejado todo tu esfuerzo.